La chica con ojos color whiskey.

Di mi nombre.
Me apetece tomarme unas cervezas, follarme unas cuantas palabras y parir un texto con tu nombre,
fuera hace demasiado ruido, la gente se pierde ahí fuera, quédate y deja que este sonido interior ahogue al exterior.
Dejemos que nuestros caos se alimenten
que la carne de nuestros deseos se inflamen
déjame lamer tu mente brillante
deja a este canalla ser tu caballero aberrante
jodemos como depravados
como cerdos disfrutando del barro
beso los vestigios de tu furia
tu risa me acaricia
te oprimo contra mí con mi zarpa
desvisto tu piel de marmórea
tu embrujado gemido me domina
y se hunde mi vida si esto es solo sueño
contigo
creo esperanzas en el infierno
tengo la palabra de mi lado
mi mente abrirá caminos
y querrás cogerme de la mano
te llevare a sentir el cosquilleo subiendo por tus piernas
no la intolerancia, la angustia, la impotencia,
te llevare a escalar por la resistencia
no los miedos, no los celos, no a la valentía en cuarentena,
te llevare conmigo donde sea
aguantaremos cualquier tormenta
agárrame la mano
serás el alma y la piel de esta sinfonía
te llevaré a ver el mar
veremos la tristeza y la alegría sin tregua efímera
veremos el rostro del amor queriéndose escapar y no querrás y apretaras
veremos la sonrisa impagable que nos resucitara
el hallazgo de una idea
un sentimiento, una razón, una experiencia
la constancia de la ignorancia
condenó mis alabanzas a la vida al olvido
y de esta llamarada de frío
regalas a mis sentidos
nuevas formas de sentir otros caminos
alargar la inteligencia
la calma entre los truenos
la tristeza de lo bello
la esperanza del intento
la voluntad del deseo
el arañazo de tus besos
que me hacen querer estar contigo
ahogando el sonido exterior
con nuestro sonido interior
eres la coca del Estudio 54
la marihuana y los alucinógenos de Woodstock
la cerveza y el vino de Bukowski
el opio para Baudelaire
el beso que une al que quiere ser artista con el arte
y eso te hace arte
y ni la gracia improvisada del dibujo de las nubes con el viento se acerca a la belleza de este monumento
de este paisaje de tu piel rozando mi piel
mordamos el triunfo de nuestro propio gozo,
locos como ayer
andamos sin guía pero sin agonía
amamos nuestra demencia
huyamos de la mayoría
de la normalidad
huyamos del opio de la vaga rutina
sed exigente de placer
lamo tu trono constelado de joyas luminosas y acaricio ese precioso palacio de exótica pompa
de contemplación libidinosa
cualquiera que mire, mirará celoso
mujer de escala de principio a fin
puro espectáculo de inmortal pecado
Mis raíces crecen en tu fe
no soy un optimista pero eso no quiere decir que no lo intente a muerte
y joder
tus ojos color whiskey han debido emborracharme, con el baile de sus converse,
porque hasta oigo a mi gato maullar tu nombre.
Y ahora
ronronea tú mi nombre.

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